Boric ofreció que Chile sea la sede para los diálogos de paz entre el gobierno de Colombia y el ELN

El presidente de Chile, Gabriel Boric, recibió en el palacio presidencial La Moneda a la vicepresidenta electa de Colombia, Francia Márquez, quien se encuentra de gira por varios países sudamericanos.

Como parte de las conversaciones, Gabriel Boric sorprendió con el anuncio del ofrecimiento de su gobierno a la vicepresidenta electa de Colombia Francia Márquez, de que sea el territorio chileno el lugar donde se desarrollen las negociaciones de paz.

La posible reactivación del diálogo entre el Gobierno colombiano y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), es uno de los desafíos centrales de Gustavo Petro, quien junto a Márquez asumirá el domingo 7 de agosto.

Con un ojo en la política regional y por separado, Alberto y Cristina recibieron a Francia Márquez

“Saludamos con mucha alegría que hoy el presidente Boric haya manifestado no solo su disposición de acompañarnos en esa tarea del logro de la paz sino que ofrece su casa, Chile, como sede para los diálogos de paz entre el Estado colombiano y el ELN”, aseguró Márquez en una charla en la Universidad de Chile posterior a su reunión con Boric.

Tanto desde el futuro Gobierno colombiano encabezado por Petro, como desde el ELN han mostrado su disposición a reanudar las negociaciones de paz que comenzó el expresidente Juan Manuel Santos en 2017 en Quito (Ecuador) y que se llevaron a La Habana (Cuba) en 2018 sin avances.

Con el cambio de Gobierno en 2018, los diálogos quedaron suspendidos por la exigencia del presidente saliente, Iván Duque, a la guerrilla de liberar a todos los secuestrados que tiene en su poder y renunciar a todos los crímenes relacionados con narcotráfico, minería ilegal, atentados a infraestructura eléctrica y de petróleo, entre otras.

“Nuestro principal desafío es lograr la paz en Colombia, ese es el desafío mayor”, apuntó Márquez, quien se encuentra en Chile en el marco de su gira por distintos países sudamericanos, entre ellos Brasil, Argentina y Bolivia.

En el encuentro con Boric, que fue a puerta cerrada, participaron la canciller chilena Antonia Urrejola, y la delegación que acompañaba a la futura autoridad colombiana, entre ellos el coordinador político, Carlos Rosero, y el senador Alexander López.

El presidente Boric no hizo declaraciones sobre el tema pero sí señaló en su cuenta de Twitter que Márquez es una “gran lideresa y defensora medioambiental con quien comparto la visión de unión de nuestros pueblos y América Latina”. “¡Miro con mucha esperanza y alegría lo que está pasando en Colombia!”, agregó el mandatario, asumido hace pocos meses en Chile.

Boric y Márquez se volverán a encontrar en poco más de una semana en Bogotá en la ceremonia de investidura del 7 de agosto en la que Márquez, una reconocida activista y abogada procedente de Cauca, una de las zonas más golpeadas por el conflicto armado, se convertirá en la primera mujer afro vicepresidenta de Colombia.

“El 7 de agosto será un momento disruptivo para Colombia, hemos tenido una política neoliberal sistemática, estructural, que no nos ha permitido salir de muchos desafíos”, afirmó Márquez, quien adquirió relevancia en la campaña por su discurso contra las desigualdades y la defensa de “los nadies” y los excluidos de Colombia.

Antes de asumir, la vicepresidenta electa tuvo una intensa gira por la región, que la llevó en su primera parada a Brasil, donde todas las encuestas colocan como vencedor en las elecciones de octubre al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, con quien se reunió en San Pablo.

Tras su paso por Chile, viajó a Buenos Aires, donde se reunió el viernes con Alberto, con Cristina (por separado), y donde participó en actividades en el Instituto Patria y en el Centro Cultural Kirchner, en una conversación pública coordinada por el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y organizada por el Instituto Nacional contra la Discriminación.

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